viernes, 9 de diciembre de 2011

¿Por qué Roberto Morán?

En las pasadas semanas el Clan Financiero postuló a Roberto Morán para recibir el Premio de Educación Financiera otorgado por Banamex.




Aun cuando no ganó el premio decidimos publicar las cartas que mandamos (un resumen de ellas) para hacer públicas nuestras razones de porque hoy en día no hay un mejor promotor de la cultura financiera en México que él.



Esta es una breve síntesis de mi carta:



"Roberto, a través de la revista que edita es quizá el mejor difusor de la cultura de finanzas personales hoy en México. Su trabajo beneficia a miles de personas en México principalmente en los sectores C y C+ (clase media) para quienes la información financiera es particularmente importante.

Roberto ha logrado hacer de las finanzas personales un tema divertido, práctico y con información relevante para personas de todos los niveles, edades e intereses y características. Gracia s a é por primera vez en México hay una revista de finanzas personales leíble, práctica y enfocada a diversos sectores de la sociedad. Dinero Inteligente está poniendo en la mesa de las familias mexicanas el tema de la buena acción financiera. Rompiendo el tabú que ha existido, durante siglos, en torno a la comunicación del dinero. En la manera en que los lectores se informan (y lo transmiten a su círculo inmediato) todos pueden tomar mejores decisiones de dinero y tener beneficios directos en su vida.

Roberto, a través de su trabajo logra cada día una mayor equidad social ya que una de las principales armas para acabar con la desigualdad que existe en nuestro país es el alfabetismo financiero y eso es justamente lo que él está logrando."

 
Estas son las cartas que mandaron mis compañeros del Clan Financiero también apoyando a Roberto.
La de Karla Baylyla de So Sanchez, Desde Juarez El Peso Nuestro; La carta Sofi Macias ;La carta de Vivir como Reina;

viernes, 16 de septiembre de 2011

50 RAZONES POR LAS QUE AMO A MÉXICO


México para los mexicanos. Una relación que más que en un libro de turismo se puede explicar en uno de psicología. Los ciudadanos tenemos una relación polifacética con nuestro país. Pero, más allá de la crítica y del típico discurso inconforme hay una realidad que no ha lugar a dudas: El amor que tenemos por México es indiscutible. Pocos países se te meten en la corazón como el nuestro. 

Amar a México no tiene nada que ver con la razón ni con la contabilidad de los bueno vs lo malo, tiene que ver con las tripas, con la manera en que se me enchina la piel cuando oigo el himno, con el trazo firme con el que escribo “mexicana” cada vez que solicitan mi nacionalidad. Con lo inexplicable. Con lo cotidiano. Con lo conocido. Con lo cercano. Con lo cursi. Con lo sentimental.

Así es que estas son las razones por las que un viajero experto…, y más importante, una ciudadana experta ama a su país.

  1. Los días claros en que se pueden ver los volcanes desde cualquier lugar del DF
  2. Cantar el himno en el estadio cuando juega la selección…
  3. …Ver a 100,000 personas haciendo lo mismo.
  4. La bandera gigante que ondea en el Campo Marte
  5. Las mujeres luchonas de la sierra, del campo y la ciudad que sacan adelante a sus familias a pesar de todo.
  6. El taxista que se apiada de mi y me deja pasar en una intersección.
  7. Los albures que entiendo y los que no.
  8. Los espectaculares de las librerías Gandhi.
  9. Las espectaculares pirámides de Chichen Itza.
  10. Los encabezados de los diarios alarmistas que venden en los altos.
  11. Las parejas bailando al son de la marimba en cualquier zócalo de provincia.
  12. El ingenio constructor: la llanta con mecates que es un columpio.
  13. Los tacos a las seis de la mañana.
  14. El tequila que hizo imperativos esos tacos
  15. El hecho que me tomé ese tequila con virtuales desconocidos que ahora son mis “hermanos”.
  16. Cantar con los Mariachis y los tríos. Aun cuando solo me sé el estribillo (y mal sabido).
  17. Los tres Huastecos.
  18. La vista desde el Castillo de Chapultepec.
  19. Tratar de entender la letra del himno nacional.
  20. Los chiflidos y toquidos de los viene-vienes cuando te ayudan a desestacionarte.
  21. Las películas Sólo con tu pareja y Arráncame la vida.
  22. El que me digan “seño”, cuando no saben si soy señora o señorita.
  23. La poca gente que sigue fiando. El “no te preocupes después me los pasas”.
  24. Los pueblecillos en donde la modernidad parece detenida y los niños todavía juegan bote pateado en las calles.
  25. Puerto Escondido y la playa de Zicatela
  26. La Condesa
  27. Mi familia y mis amigos.
  28. La buena onda. Porque somos gente buena onda.
  29. El poder tutear a casi todos.
  30. Las miles de iglesias en Puebla.
  31. La organización Pro Vivah.
  32. Leer las revistas de sociales (odio admitirlo).
  33. El jardín del museo de Arte Moderno y la fuente del de Antropología.
  34. El Parque México y el chicharronero, paletero, algodonero…
  35. Todo lo que sea de chamoy.
  36. Los gritos de los marchantes en los mercados.
  37. Los tlacoyos echaditos en el comal.
  38. El chocolate caliente de Oaxaca recién molido y hecho.
  39. Cantinflas.
  40. Cualquier cosa de la pluma de Jorge Ibarguengoitia
  41. El doblaje de Don Gato y su pandilla.
  42. El libro “Triptofanito”.
  43. La obsesión de los niños con el Fútbol. El fervor con el que le vamos a nuestro equipo favorito aun cuando lleve todos los partidos perdidos.
  44. La última y nos vamos.
  45. El no saber si la política nacional es tragedia o comedia.
  46. El que a una fiesta te inviten con la hora de inicio pero no te limiten a que hora va a acabar
  47. Las galerías y callezuelas en San Miguel Allende
  48. “Ten Miedo de Mi” cantada por Fernando Delgadillo
  49. Las jacarandas que una vez al año florecen en Paseo de la Reforma.
  50. …La emoción de pensar que esta lista fácilmente, y sin darle muchas vueltas, pudiera tener 50 razones más.
(Originalmente publicado en Travel and Leisure, septiembre 2011)
 

    viernes, 19 de agosto de 2011

    "Wall Street" la película que marcó mi vida profesional

    En esta cadena de posts el Clan Financiero ha decidido escribir sobre películas que cambiaron nuestra vida profesional y nuestra percepción del dinero. Cuando plantearon en tema no tardé ni medio nanosegundo en definir cual sería la mía.


    La primera vez que vi la película Wall Street (la original, en donde sale Michael Douglas cuando era guapo y Charlie Sheen antes de ser loco) supe que quería hacer yo el resto de mi vida.
    Remóntense a 1987. Estaba yo entrando a la adolescencia, con dientes que parecían del reino animal (no precisamente humano, más bien conejo), cuerpo  que no encontraba forma, una afición por leer que rayaba en lo patético y un desconocimiento total sobre hacía donde iba mi vida. Que bueno que no existía Facebook en ese entonces, no sé como hubiera lidiado con los comentarios a mis fotos en esos años.


    Y un día, en el cine Reforma Comermex (cuándo todavía había intermedio en las películas, ¿alguien se acuerda?) los misterios de la vida quedaron resueltos en el personaje de Gordon Gekko. En el instante que lo vi aparecer en la pantalla supe yo me tenía que dedicar al mundo del dinero*. Había ido yo a “ligar” al cine pero quedé enamorada de lo que vi en la pantalla.
    No era sólo el carisma del hombre y el glamour de la súper riqueza y poder, lo que me volvió loca fue ver, por primera vez y de una manera muy hollywoodesca, los movimientos de los mercados financieros. Las llamadas, los gritos de compra, los tickers moviéndose, la adrenalina del mundo del dinero.
    Durante años tuve una fantasía recurrente estilo “La rosa púrpura del Cairo” en donde Gordon Gekko saltaba de la pantalla y me invitaba a conocer su Wall Street.
    Para la gran mayoría de la gente Wall Street era una llamada de atención sobre los peligros de la avaricia, para mi era un llamado de Sirena “Adiiiiiiina, veeeeeeen hacia acaaaaaaa.”
    Ojo, incluso a esa edad me quedaba muy claro las implicaciones de los crímenes financieros. Eran justo las épocas de los escándalos de Michael Milken, Ivan Boesky, los junk bonds y los escándalos de insider trading.



    Yo, a mis menos de 14 años, conocía las historias al derecho y al revés (repito, era una lectora compulsiva). Pero aún así quedé pasmada por la filosofía de vida de Gekko. La seguridad con la que dirigía el mundo, su mente prodigiosa, la manera en que podía pararse frente a una junta de accionistas y cambiar el destino de una gran corporación. Su énfasis en el eficiencia y su idea, fría pero real, de que el desarrollo humano no se da por la magnanimidad de la gente, sino en la medida en que cada quien encuentra una ganancia personal (Qué si se ponen a pensar no tiene nada de malo, Adam Smith lo había escrito en “La riqueza de las naciones”  200 años atrás).
    Hoy, 25 años después de ver por primera vez “Wall Street” puedo decir que no soy Gordon Gekko pero vivo mi vida analizando y escribiendo sobre los Gekkos actuales.
    Manejo cantidades con muchos menos ceros de lo que hacía él (aún con la inflación ajustada) y me dedico a una rama mucho más cálida de las finanzas.
    Sin embargo, el discurso de Gekko en la película (el famoso “Greed is good”) sigue siendo uno de los pilares de mi motivación, Me lo sé de memoria y me lo repito en momentos de flaqueza, de dificultad o cuando quiero tirar la toalla.
    Puede ser que la palabra avaricia suene un poco fuerte (siempre la asociamos con los pecados capitales) pero en un contexto productivo tiene mucho de razón. Yo la interpreto como el deseo.
    Se los escribo aquí. Quizá no es 100% idéntico a lo que dice en la película (la memoria, en 25 años, llega a cambiar un poco las cosas), pero espero lo analicen, lo disfruten y piensen en él de vez en cuando.
    Imagínense mientras lo leen  a mí con mi mejor interpretación de Gekko (porque la estoy haciendo mientras lo escribo):


    “El punto es, damas y caballeros, que la avaricia (por faltar una palabra mejor) es buena. Desear es correcto. Desear funciona. Tener deseos clarifica y captura lo que es el espíritu de la evolución. La avaricia en todas sus formas- deseo de vida, de dinero, de conocimiento- ha marcado el desarrollo de la humanidad.”



    Para seguir con la cadena de las películas que marcaron nuestra vida financiera vayan al blog del Pequeño Cerdo capitalista El post de Sofía sobre su película financiera

    *Existe otra razón por la que me dediqué a las finanzas pero esa es materia de otro post.

    viernes, 10 de junio de 2011

    Pecados Capitales: Lujuria y Dinero

    Durante muchos años pensé que la lujuria no debía estar dentro de la lista de los pecados capitales. Primero porque en todos los cuadros y dibujos bíblicos y dantescos sobre el infierno la gente inculpada por lujuria parecía mucho más guapa y divertida que aquellos condenados por Avaricia o Soberbia y, en segundo lugar, porque mi naturaleza femenina me hace naturalmente lujuriosa (algo que considero un activo más que un pasivo en la contabilidad de mi vida).
    Quizá esa lujuria intrínseca fue la que me llevó a estudiar economía y dedicarme a manejar “los dineros”. Varios estudios científicos recientes confirman que la sección del cerebro que se activa cuando pensamos o manejamos dinero, llamaba el cortex orbitofrontal, es la misma que se “prende” cuando pensamos en sexo o en otros corporales. Ambos deseos son tan primales- básicamente la necesidad de reproducción y de manutención- que el cerebro reacciona a ellas de manera muy similar.
    Los Pecados Capitales se confunden con los mercados de capitales.

    Y es justo aquí en donde las cosas se empiezan a complicar. Son tan similares que a veces confundimos los órganos con los que tomamos las decisiones: Nuestras acciones de dinero las definimos con el corazón (el órgano exacto no lo escribo en pro de hacer este post  clasificación A).
    Por eso cometemos dos de los mayores errores en finanzas personales, el primero avivado por la testosterona es con el que más pecan los hombres mientras que el segundo es típico de la naturaleza monetaria femenina (aunque ambos son cometidos por los dos sexos).
    La lujuria por dinero, en su versión masculina, implica el buscar gratificación inmediata de nuestras decisiones financieras. Muchas veces somos víctimas de estratagemas financieros, o no leemos la letra pequeña de los instrumentos en los que invertimos, o buscamos la opción más riesgosa, porque lo que busca el cerebro es el éxtasis de lo inmediato. Aun cuando internamente sabemos que lo que estamos haciendo no es lo más adecuado, la posibilidad de tener más, más grande y más pronto nos empuja a tomar decisiones muy riesgosas, y potencialmente erróneas, para nuestro patrimonio.
    En su versión femme, la lujuria financiera nos pone un antifaz y nos hace pensar que con el dinero vamos a poder tapar hoyos o carencias no monetarias que existen en nuestra vida. Por eso las mujeres somos mucho más proclives a cometer errores financieros garrafales cuando buscan enamorar o “conservar” a un hombre, ser víctimas de consumo compulsivo o tratar de arreglar los problemas “repartiendo dinero”, lo tengamos o no.
    ¿qué hacer? Romper la relación que existe entre el dinero y la lujuria es imposible. Sin embargo el simple hecho de estar conscientes del efecto cruzado entre el placer y las decisiones monetarias es un arma muy potente para ayudar a tomar mejores decisiones financieras en donde se separe la cartera del cortex orbitofronal. Cómo bien debería de decir el dicho… El placer es el placer y el dinero es el dinero.



    Más Pecados capitales y su relación con el dinero… visita www.elpesonuestro.com para leer sobre la gula…mmmm

    martes, 5 de abril de 2011

    El alto costo de la obesidad, adhd, vista floja...y el resto de los padecimientos infantiles




    No hay nada más angustiante para un padre que enfrentarse a un problema con un hijo, sea físico  emocional o intelectual; y el camino para solucionarlo puede tener un fuerte impacto tanto en el corazón como en la cartera.  Las Finanzas Personales son, muchas veces, el colchón en el que se reflejan (y por medio el cual se pueden o no resolver) muchos problemas de la vida diaria.

    La cantidad de niños que cada vez necesitan diversos tratamientos es cada vez más alta, tanto por  el creciente número de condiciones y padecimientos (como la obesidad) producto de cambios en el estilo de vida, como por  el sobrediagnóstico que existe s
    e calcula que uno de cada 5 niños en edad primaria es diagnosticado con algún tipo de problema (psicológico, visual, auditivo, motriz o emocional). A propósito de esta estadística a mi papa, hombre muy sabio, le gusta decir “en mi época todos éramos cojos, chimuelos, traviesos y todos crecimos para ser adultos de bien”.




    Lo que más queremos los padres es que nuestros hijos desarrollen sus capacidades y oportunidades al máximo y este tipo de problemas son particularmente angustiantes, en parte por el estigma social que conllevan (y la etiqueta que le ponen al niño), en parte por la falta de información que hay al respecto (y el exceso de charlatanes oportunistas que ofrecen falsas soluciones) y, en parte, por que la solución toma tiempo y dinero.

    El diagnóstico de algún problema ocasiona serios cambios en la dinámica y finanzas familiares; el costo anual promedio de algunos e estos problemas puede superar los $30,000 pesos anuales y muchas veces se requiere por 4 o 5 años para ver resultados. Y aunque todos decimos que con la salud de los hijos no se escatima, parte del éxito del tratamiento depende de la buena administración que tengamos con nuestros recursos para permitirnos solventar los largos años que puede durar.

    Empieza bien desde el principio

    Para cualquier trastorno infantil, desde obesidad hasta ADD y problemas emocionales, toma en cuenta lo siguiente.

    1.- Actúa. Por más difícil sea de aceptar que un hijo no es “perfecto”, entiende que los problemas no se corrigen solos (el argumento de “en mi época no hacíamos tanto rollo” es falso) y dejarlos a la deriva pueden ocasionarle a tu hijo problemas académicos, sociales y de auto-imagen. Entre ante empieces mejor, más rápida y barata, va a ser la solución.

    2.-Invierte en el diagnóstico. Quizá la parte más importante es tener el diagnóstico correcto que te permita darle a tu hijo el tratamiento adecuado. Busca al profesional más calificado en diagnóstico (aun cuando tengas que insistir para que te de una cita) y busca realizar los estudios en los lugares más competentes, para evitar tenerlos que repetir. Guarda los resultados de todos los análisis para poder hacer un comparativo cada cierto tiempo y para evitar tenerlos que repetir en caso de que requieras una segunda, o tercera, opinión. RECUERDA QUE NO HAY SOLUCIONES MAGICAS O PRODUCTOS MILAGRO PARA RESOLVER NINGUN PROBLEMA. El caer presa de uno de estos esquemas no sólo cuesta caro sino también retrasa la solución real. 

    3.- ¿Cómo encontrar al terapista, nutriólogo...? Como buen consumidor debes de comparar entre las diferentes opciones que tienes para el tratamiento. Antes de elegir a un médico o terapista (y de desembolsar un solo centavo) platica con dos o tres profesionistas y averigua su técnica, enfoque y la dinámica que tiene tanto con tu hijo como con los padres. Una buena manera de encontrar el tratamiento es por medio de gente que haya tenido experiencias similares exitosas; pero aún ante las mejores recomendaciones nunca olvides oír tu propio instinto.

    4.- Cada niño es un mundo. No hay recetas de cocina para solucionar el problema. “Se requiere un enfoque multidisciplinario, advierte el terapeuta Jorge Anzures director de la clínica de Neuroterapia Computarizada, no es cuestión de dar solamente un medicamento, o solamente ayuda psicológica, se requiere de un enfoque multidisciplinario y personalizado para conseguir resultados.” Todo diagnóstico y tratamiento debe de estar hecho a la medida de tu hijo, no en base a un machote preetiquetado.

    5.-Lo que no cuesta (pero vale mucho). Los cambios en la dinámica de la casa son un apoyo indispensable que permite acelerar el avance. De nada sirve gastarse miles de pesos en médicos si existen fallas saboteadoras en el ambiente familiar. De nada sirve poner el niño a dieta si la despensa familiar sigue plagada de comida chatarra. Evalúa lo que puedes cambiar en la casa y aplícalo, desde cambios en los patrones de alimentación hasta la relación que existe entre los padres (particularmente si son divorciados). La férrea disciplina en el hogar es un arma fundamental para apoyar a los hijos con problemas.   

    6.-Prioritiza. El pagar un tratamiento puede implicar recortes debas de recortar otros gastos (vacaciones, diversión, incluso parte de tu porcentaje de ahorro), pero este es uno de los gastos más importantes que deber puedes hacer.

    7.-Investiga. Aun cuando el tratamiento no este cubierto por tu seguro médico puede ser que los análisis, como electroencefalogramas, o los aparatos auxiliares, como implantes auditivos, si lo estén; averigua que es lo que si puedes deducir de tu seguro.

    8.- Planes de pago. Si encuentras un tratamiento que consideras ideal, pero el costo no se ajusta a tus posibilidades, alza la voz. Propón al médico o terapista alguna opción de pago a plazos, de descuento o de pago en especie; cualquier profesionista realmente profesional va a tratar de encontrar una solución para no dejar al niño sin tratamiento.

    9.- Paciencia. Aun cuando te “gane la prisa” por solucionar el problema no exageres, de nada sirve sobresaturar a un niño con 25 terapias diferentes, al contrario puede ser contraproducente (y muy caro). No esperes resultados de un día a otro, cada seis meses o un año revalora la situación, mediante análisis o exámenes, para ver los resultados y evaluar si el camino que llevas es el correcto.


    Recuerda que, aunque en este momento no lo parezca, todos los problemas tienen solución, y que el arma más importante que tienes es el amor que como padre puedes tener hacia tus pequeños.

    lunes, 4 de abril de 2011

    Respuestas al test: Califícate como maestro financiero de tus hijos

    Nadie nace sabiendo,  el análisis de las respuestas no es un juicio de valor sobre tu actuación como padre o madre, es simplemente un punto de partida que te puede permitir corregir errores y tener un enfoque diferente.

    Si tu contestaste... 

    La mayoría A: “Limite” es una palabra que no entra en tu vocabulario, para ti el dinero es sinónimo de cariño. En una parte tienes toda la razón, como padre uno tiene la obligación de querer y consentir a los hijos...pero con inteligencia. El mejor amor que puedes dar (y que a largo plazo es el que ellos más van a agradecer) es el de darles las armas y conocimientos necesarios para que sean capaces de enfrentar los problemas de la vida y que aprendan a lidiar con “el mundo real” que van a conocer más adelante.

    La mayoría B: Para ti el dinero es un mal del que debes proteger a tus hijos, por lo que tus lecciones están basadas en recetas estrictas. Quizá quieres ahorrarle a tus hijos el tener que lidiar con un mundo financiero tan complejo y complicado; sin embargo, tu no puedes ya cambiar el cauce de un mundo donde las opciones son tantas que las recetas son inservibles. La mejor arma es la toma de decisiones en base a conocimientos reales. La educación financiera no debe de ser algo impuesto o forzado debe de ser un aprendizaje que el niño entienda y razone.

    La mayoría C: Tristemente el mundo no es un lugar maravilloso, no eduques a tus hijos como si lo fuera, demasiada ingenuidad lleva a crear expectativas poco adecuadas a la realidad. Como todas las lecciones de la vida, no te arriesgues a que tus hijos las aprendan “en la calle”, ya que la información que reciban puede ser errada. Tú eres el responsable de educar a tus hijos a transitar, y a tomar decisiones realistas, en el mundo en el que vivimos.

    La mayoría D: Tu estás conciente de que  la educación financiera es un proceso de “estira y afloje”, que no se puede educar a los hijos esperando perfección absoluta en sus acciones y que se debe tener cierta tolerancia a los errores que se cometan; que no existen manuales generales para la educación de los hijos: el enseñar a sus hijos el manejo “Inteligente” del dinero es un proceso que depende no sólo del entorno sino también del carácter y necesidades particulares de cada niño por lo que (inclusive entre hermanos) no existen reglas escritas en piedra, lo único infalible es educar con el convencimiento de que los hijos se conviertan en adultos informados, que sepan tomar, en la mayor parte de los casos, decisiones adecuadas.

    y tu? Qué tan buen maestro financiero eres?

    Toma un lápiz y responde



    1) ¿Cuándo se debe de empezar a tratar el tema de dinero con los hijos?:
    a) Cuando empiecen a ganar su propio dinero.
    b) Desde que empiecen ir al kinder.
    c) Cuando aprendan a sumar y restar.
    d) Tan pronto como los niños muestren curiosidad sobre los temas de dinero (por ejemplo cuando empiecen a cuestionarse sobre el precio de las cosas o lo cuestionen si algún objeto es caro o barato).

    2) Tu hijo chico (2 o 3 años) saca un dulce de una tienda sin pagarlo, tú:
    a) te enterneces y suspiras (después de todo, es algo que todos los niños hacen).
    b) Lo regañas: "La gente va a decir que estoy educando a un ladronzuelo".
    c) Devuelves el dulce sin que el niño se de cuenta.
    d) Acompañasal niño de regreso a la tienda, lo hace devolver el caramelo y le explica que en una ocasión posterior (si se presenta) quizás podrán comprar otro.

    3) La mejor manera de que los niños aprendan sobre el buen manejo del dinero es:
    a) No vale la pena esforzarse mucho por enseñarles, el buen manejo del dinero está en los genes (hay a niños a los que de les da y a otros a los que no).
    b) Que lean libros, tomen clases en centros especializados y lo busquen en Internet.
    c) Que convivan son gente que usted considera consciente y capaz en el manejo del dinero.
    d) Con el buen ejemplo de los padres.

    4) ¿Cuánto debe recibir un niño de semana (o "domingo")?
    a) "Lo mismo que me dieron a mi mis padres (después de todo ya le quitaron tres ceros a la moneda)"
    b) Lo mismo que te dieron a ti tus padres, ajustando la inflación que ha habido en este tiempo.
    c) Lo mismo que reciben los amiguitos o compañeros de sus hijos.
    d) Lo que necesita (de acuerdo a un presupuesto realizado en conjunto).

    5) Cuando se debe de empezar a dar semana a un hijo:
    a) "Nunca, yo les doy el dinero que necesiten cuando lo necesiten".
    b) "Nunca, debo yo controlar y aprobar todos los gastos que realicen".
    c) Cuando entren a secundaria y sean más independientes.
    d) Cuando conozcan el valor de cada billete y moneda y sepan contar hasta el cien..

    6) Si tu hijo te pide un aumento de semana, ¿cuál debe ser la primera pregunta?
    a) ¿Qué, ya tienes novia?
    b) ¿Por qué piensas que te lo mereces?
    c) ¿Qué gastos adicionales tienes?
    d) ¿Cuánto de este aumento vas a destinar para tu ahorro?

    7) Te  enteras que tu hijo decidió comprarle a un amiguito algún objeto demasiado caro (que acordó pagar en mensualidades pero que aun así es demasiado caro e innecesario). ¿Qué haces?
    a) Felicitas al niño por sus altas aspiraciones y le ayudas a pagarlo.
    b) Castigas a tu hijo por soñador y le confisca el objeto.
    c) Permites al niño conservar el regalo y vigilas, personalmente, que cumpla con los pagos.
    d) Devuelves el objeto y establecer un plan para comprar un objeto alternativo (pero más adecuado al presupuesto).

    8) Tus padres (o suegros) te preguntan que regalarle a tus hijos en Navidad o en algùn otro evento ¿qué contestas?
    a) "Regalos y dinero" (los nietos son para consentirlos).
    b) Nada, el afecto no se debe comprar.
    c) Lo deja en manos de los abuelos, que ellos decidan.
    d) Toma una decisión mediando entre lo que el niño quiere y los objetos que necesita.

    9) ¿A qué debe destinar un niño o adolescente su dinero?
    a) A lo que quiera (siempre y cuando no sean objetos prohibidos).
    b) A ahorrar.
    c) A útiles y artículos necesarios para la escuela.
    d) Lo debe dividir entre gasto y ahorro.

    10) Tiene la posibilidad de dar a tu hijo adolescente alguna de las siguientes formas de pago ¿Cuál eliges?:
    a) Una tarjeta de crédito en la que tu pagas los gastos (después de todo uno trabaja para consentir a sus hijos).
    b) Una tarjeta de crédito y que tu hijo pague los gastos (que aprenda a manejar los límites)
    c) Nada, que utilice puro efectivo.
    d) Una chequera o tarjeta de débito.

     Las respuestas en el próximo post

    viernes, 18 de marzo de 2011

    Como aprendí de mis amigos twitteros

    En los últimos días he twitteado mucho sobre un problema que hay en el salón de preescolar de mi hijo (lo relato en breve)  y cómo, siendo una nata defensora de los pleitos perdidos, me he involucrado.
    Una de mis seguidoras en twitter me pidió que le relate la historia y me dio una de las mejores respuestas que he leído en mi vida (y vaya que leo mucho) sobre el problema de las mujeres hoy.
    De un problema estúpido la respuesta fue maravillosa y le dio al clavo a uno de nuestros principales conflictos femeninos.

    Les copio el intercambio de ideas y les pido su opinión.

    Le escribí yo primero la historia:
    "Te platico. En el salon de kinder de mi hijo hay una regla: Cuando una mama va a hacer una fiesta tiene que checar con la vocal para verificar que no se empalme con ningún otro  cumpleaños. Como punto a tomar en cuenta, este es un salon Montessori por lo que  hay niños y niñas de 3 a 6 años juntos.

    Una mama de uno de los niños grandes se equivocó e invitó a la fiesta de su hijo sin preguntar a la vocal. La mamá eligió esta fecha pues estaba haciendo la fiesta a todos sus hijos juntos. 

    Casualmente ese dia ya habia una fiesta de una niña chica.

    Se armo un desmadre. La mama de la niña (que si hubiera podido cambiar de fecha pero sintió herido su orgullo) y que, CASUALMENTE, es  amiga de la vocal decidieron que, como castigo, la mama del niñosolo podia invitar a cuatro ninos de la clase y que los deman tenian que ir a la fiesta de la niña.

    En fin me puse como fiera aun cuando la mama afectada no es mi amiga.
    Se me hizo un asunto de principio. Como le podemos pedir a los ninos q no hagan bullying si las mismas mamas lo hacemos.
    Un abrazo"

    Esta fue la respuesta maravillosa que recibí:

    "Es increible como los seres humanos siempre acabamos abusando del poder por más insignificante que sea el rubro en donde lo hacemos.
    Es una pena además que los niños se vean afectados por las decisiones "grilleras" de los adultos que realmente no se interesan tanto por ellos como por su posición frente a las demás.
    Es una pena además que las mujeres sigamos permitiendo estos espacios exclusivamente femeninos en donde no tan solo no se resuelven los problemas de la mejor formas sino que además se crea más drama y conflicto. Lo que sea de cada quien, pero los hombres son un poco más racionales...a lo mejor esto de "solo para mujeres" nos trae más problemas que beneficios.
    María"
    @marina_delmar

    Wooooow


    viernes, 18 de febrero de 2011

    Protege tus ahorros

    oktor Dinero: He ahorrado por años hasta que por fin tengo un pequeño “guardadito” con el que pienso vivir mis años dorados. Me ha costado tanto trabajo juntar este dinero que me da miedo que algo le pase.
    ¿Alguna sugerencia para poderlo conservar fuerte y sano?
    Para una generación acostumbrada a preocuparse sólo por el presente, pensar, y más aún, ahorrar para el futuro, es una tarea que requiere un enorme compromiso, paciencia y dedicación.
    La mayor parte de nosotros vivimos utilizando como mantras frases como “mañana será otro día” o “porque hacer hoy lo que se puede dejar para mañana”, y en consecuencia postergamos planear para tener un ahorro digno.
    Incluso las mejores intenciones muchas veces pierden su camino.
    Podemos empezar muy comprometidos a formar un pequeño “nidito” para el retiro (ya sea como apoyo a una afore o en sustitución de esta), pero poco a poco, conforme pasa el tiempo y se presentan otras opciones de gasto u otras “prioridades”, vamos perdiendo enfoque y dejamos de darle la importancia que requiere.
    Si ya empezaste con una cuenta de ahorro para el retiro, te felicito, tienes ya una buen parte del camino andado, ahora pon énfasis en no cometer los siguientes errores para poder mantener tu dinero “fuerte y sano” y maximizar el provecho que vas a sacar en tus años dorados.
    Error # 1: No seguir ahorrando. Aun cuando ya tengas el dinero que crees necesitar para tu retiro o estés muy confiado de poderlo obtener pase lo que pase, es muy importante que NO DEJES DE AHORRAR; el tener una cuenta cada vez más grande y fuerte te permite no sólo contar con mayores recursos monetarios para tu retiro, sino relajar un poco las expectativas que tienes en torno a los rendimientos que esperas recibir.
    Si ya conseguiste la meta que tenías planeada para tu cuenta del retiro, lo que puedes hacer es relajar tus políticas de ahorro; por ejemplo, en vez de depositar en tu cuenta para el retiro 10% de tus ingresos, deposita cinco o siete por ciento.
     Error #2: No cambiar tus inversiones de acuerdo con la edad. Conforme vas “envejeciendo” tu portafolio de inversiones debe ir mutando. Entre más se acerque la edad de tu retiro menor es el riesgo al que debes de exponer tu patrimonio con el fin de evitar sufrir un susto por algún revés del mercado. La teoría dice que debe invertir en el mercado accionario (o sea en instrumentos más riesgosos) un porcentaje equivalente a 100- tu edad. Cada cinco años reevalúa tu cuenta de retiro con el expreso fin de asegurar que poco a poco se vuelva más conservadora (ojo: debes revaluar cada año en base a otros parámetros).
    Error #3: No Reevaluar. Cada seis o 12 meses debes sentarte a revisar tu portafolio de inversiones y preguntarte lo siguiente ¿me ha dado los rendimientos que esperaba? ¿los instrumentos en los que tengo invertido mi dinero tienen un potencial atractivo a futuro?, ¿es tiempo de vender algún instrumento y/o de comprar algún otro? Con base en lo que contestes rediseña tu portafolio de inversión para poder aprovechar al máximo las oportunidades del mercado.
    …Pero también ten mucho ojo con reevaluar demasiado seguido, o sea estar saltando de una inversión a otra ante la más mínima señal del mercado, ya sea porque buscar especular expresamente o porque estás demasiado nervioso con algún evento o pronóstico. Esta es una estrategia extremadamente riesgosa que incrementa las posibilidades de equivocarte e impide que maximices los rendimientos de acuerdo con los plazos… Esto se puede considerar el Error #4: Brincar de una inversión a otra.
     Error #5: No tener una cuenta de emergencia. Además de tus cuentas de ahorro debes contar con un dinero ahorrado para usarse sólo en caso de una eventualidad, como una enfermedad que te impida trabajar o un despido inesperado.
    Debes mantener ahí dinero suficiente para solventar entre 3 y 6 meses de gastos y el dinero debe estar invertido en instrumentos extremadamente seguros y líquidos.
    El no contar con esta cuenta te puede orillar a “echarle una manita” a tus ahorros para el retiro en caso de enfrentar algún desliz en la vida.
    Aun cuando hoy sea difícil apreciar las ventajas que evitar estos errores puede tener, en un futuro, cada vez más cercano, vas a agradecerte el haberlos corregido.

    viernes, 7 de enero de 2011

    Solteros, Ricos y Fabulosos

    @CayMill* muchas felicidades para 2011 ;D esperando una publicación para los chicos solteros sin compromiso que no controlamos el $. Gracias, @GonzaloMo

    Estimado @GonzaloMo:
    Tienes toda la razón. La mayor parte de las publicaciones y los consejos de finanzas personales están enfocados a las parejas y a las familias.
    Tal parecería que en el mundo de hoy todos, tal como en el arca de Noé, manejan en pareja el dinero. Irónicamente justo lo opuesto es cierto.
    Cada vez más las personas postergan la edad de hacer pareja o, dado el creciente número de divorcios, se encuentran sin pareja y sin hijos en diversos momentos de su vida.
    Aun cuando las bases del buen manejo del dinero no distingue entre sexo, estado civil, religión y predilección sexual es un hecho que para las personas solteras existen particularidades monetarias que se deben atender.
    Al estar en esta situación civil y/o sentimental existen ventajas y desventajas.
    Por un lado, al no tener compromisos las posibilidades de ahorrar dinero son mucho mayores, por otro lado esa misma falta de compromisos formales (con la pareja o hijos) hace mucho más fácil caer en tentaciones y lujos excesivos a costa del ahorro o del creditazo.
    ¿Cuáles son las armas que una persona soltera y sin compromiso que quiere ser rica y fabulosa debe tener en su mente financiera?
    1. Basic Black. Así como un traje (o un vestido) negro son de rigor en cualquier guardarropa, toda persona debe tener en blanco y negro su plan de gastos.
    Léase un presupuesto de cuánto vas a asignar a cada una de las áreas de tu vida. Obviamente el no tener hijos ni pareja libera una mayor cantidad de recursos para los gastos personales y de diversión pero ¡OJO! éstos no deben morder el rubro del ahorro.
    Proponte metas ambiciosas de ahorro mensual.
    2. Alka Seltzer. Léase, cuidado con la fiesta.
    Los gastos de diversión y esparcimiento son, en la mayor parte de los casos, la debilidad más grande de los solteros.
    El cuidar tus gastos de diversión no quiere decir que vivas como hermitaño en pos del ahorro simplemente que te establezcas límites de cuanto estás dispuesto a gastar en ellos.
    3. Pensar en el futuro…Y no, no hablo del futuro emocional (las peticiones de abuelita de encontrar una pareja) sino en el futuro real, o sea tu retiro.
    Nunca eres demasiado joven como para empezar a ahorrar para tus años dorados.
    Es más entre más joven empieces a planear mejor vas a poder cumplir tus sueños en esa época.
    4. Herramientas superpoderosas: Lo más importante que puedes hacer para tener una vida (y un patrimonio) sano y cada vez más fuerte y feliz es contar con dos instrumentos indispensables para protegerte de las pequeñas sorpresas de la vida.
    Una cuenta de emergencia para solventar un despido del trabajo o alguna eventualidad que implique un desembolso adicional.
    Y, además, un seguro de gastos médicos, indispensable para poder cuidar tu salud sin pretextos ni asegunes (si eres soltero sin compromiso, no necesitas un seguro de vida).
    5. Para pensar… Por último me gustaría darte dos consejos adicionales que si bien no tienen que ver directamente con el manejo del dinero, si están muy relacionados con la capacidad de generarlo y cuidarlo.
    Primero, dedica una cantidad de tu tiempo y tu dinero a seguir estudiando para mantenerte a la vanguardia en tus conocimientos y en tu vida laboral.
    Segundo, al buscar y encontrar una pareja cuida desde el primer instante tener una buena comunicación financiera.